El cambio climático es la mayor amenaza medioambiental que enfrenta el planeta, pero ¿Por qué?
El principal factor de este problema es que, desde la revolución industrial hasta el día de hoy, la quema de combustibles fósiles (petróleo, carbón y gas) que son utilizados para producir energía, liberan gases de efecto invernadero a la atmósfera lo cual provoca que se aumente la temperatura del planeta y se genere una distorsión en el sistema climático.
En la página oficial de Greenpeace numeran graves consecuencias como derretimiento de los glaciares, incremento de olas de calor, inundaciones, sequías, expansión de enfermedades y colapso de numerosos ecosistemas.
Investigaciones y cifras
El año 2016, incluso en Argentina, fue registrado como el más caluroso desde 1880 lo cual contribuye a explicar la desaparición de superficies de hielo polar, dato confirmado por la Organización Meteorológica Mundial. Si la temperatura global sigue ascendiendo, nuestra región sería una de las principales perjudicadas. En Chile, en lo que va de este año, los incendios forestales arrasaron más de 600.000 hectáreas de suelos, bosques, viñas, cultivos, vida animal y vegetal.
José Luis Samaniego, director de la División de Desarrollo Sostenible y Asentamientos Humanos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) explicó que el Acuerdo de Paris, por el cual casi 200 países se comprometieron a que la temperatura global no suba en este siglo más allá de 2° respecto de la era pre-industrial, confirmó que hoy desde el punto de vista científico no hay duda de la influencia del comportamiento humano en el calentamiento global.
Un estudio realizado por la CEPTAL junto con la Fundación Bariloche determinó que el sector energético tiene la mayor participación en las emisiones de gases con efecto invernadero en la Argentina. Uno de los efectos más directos se da en la agricultura, por la pérdida de tierras cultivables o la caída de la productividad.
Además, las consecuencias de estos fenómenos pueden alcanzar a las poblaciones vulnerables principalmente por la falta de políticas de ordenamiento urbano. En Argentina, en los últimos años, hubo un crecimiento exponencial de asentamientos en zonas inundables o con contaminación. Los especialistas sostienen que el equilibrio entre las políticas contra la pobreza y las normas para cuidar el medio ambiente es uno de los grandes desafíos que deben asumir los gobiernos.
Por otro lado, la revista Nature Climate Change expuso una investigación en donde explicó que el cambio climático pone en riesgo, al menos, a 700 especies de animales entre los que se encuentran como principales perjudicados casi la mitad de los mamíferos terrestres y un cuarto de las aves.
Los científicos analizaron las curvas demográficas, las zonas geográficas, las tasas de reproducción y las evoluciones climáticas, ampliando sus conclusiones a las especies consideradas amenazadas por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). De las 873 especies de mamíferos de la lista, casi el 50% responden de manera negativa a la evolución del calentamiento global ya que limita su acceso al agua o a la comida, propaga enfermedades o reduce los hábitats.